The Murcialist en Oporto

Oporto

Una ciudad con mucho encanto...y mucho vino


El pasado mes de agosto estuve unos días en Oporto y os puedo decir que es una ciudad muy interesante, también gastronómicamente hablando. Decía Marx que para conocer un país hay que haber probado su pan y su vino, y eso fue lo que me propuse.

Porto
No sólo de bacalao vive Oporto, sino que tiene una gastronomía muy variada, con restaurantes para todos los gustos y todos los bolsillos. Además del bacalao, el plato estrella en esta ciudad es la "Francesinha", una bomba hipercalórica en forma se sándwich que lleva jamón york, filete de ternera, salchicha fresca, bacon y queso fundido, coronado con un huevo frito y bañado en una salsa ligeramente picante hecha a base de tomate y cerveza. Un plato contundente que rematamos con unas patatas fritas y una cerveza Super Bock, la más típica de allí y todo un icono, como Estrella de Levante para nosotros. Recomiendo que probéis la que hacen en el Café Santiago, que tiene fama de hacer las mejores francesinhas de la ciudad.

Francesinha

Super Bock, la cerveza estrella

Callejeando por el centro encontrareis muchas pastelerías en las que podréis probar los "Pastéis de Nata" o pasteles de nata, unas tartaletas de hojaldre y crema que son realmente adictivas.

Pastéis de Nata
A continuación os voy a recomendar dos restaurantes en los que estuve cenando, con una excelente relación calidad-precio. "BUGO Art Burgers" es una hamburguesería de diseño que da una vuelta de tuerca a este producto, mezclándola incluso con raices portuguesas, dando lugar a una hamburguesa de bacalao, o con sabores orientales. De entrante pedimos una "Bruschetta con tomate confitado, queso de cabra, mozzarella y pesto", deliciosa con el pan crujiente y el queso fundido. De entre la amplia variedad de hamburguesas que ofrecen, pedimos el "Surtido Oriental" y la "Black Angus". El surtido oriental lleva 3 mini hamburguesas, de pollo campero, de atún fresco y ternera; con noodles de guarnición y salsa agridulce, teriyaki y mayonesa de wasabi. La Black Angus la sirven con pan de sésamo, chorizo, vino de Oporto confitado y mozzarella, con patatas de guarnición y mayonesa de trufa; la carne estaba realmente jugosa. El postre también estuvo a gran altura, con un delicioso "Crujiente de queso de cabra y mermelada de calabaza, con helado de vino de Oporto", el contraste del queso caliente y cremoso con el helado de vino de Oporto es una maravilla. Precio medio: 10-20 €.

Bruschetta con tomate confitado, queso de cabra, mozzarella y pesto

Surtido Oriental
Black Angus
Crujiente de queso de cabra y mermelada de calabaza, con helado de vino de Oporto
El otro restaurante que os quiero recomendar y que realmente me fascinó fue "éLeBê Baixa". Situado en una de las calles más antiguas y conocidas de Oporto, Rua St. Ildefonso, ofrece auténtica cocina portuguesa e internacional, mezclando tradición con toques innovadores y a precios competitivos. La atmósfera del local es muy acogedora y elegante, con dos alturas, con la recepción y la parte de bar abajo y un amplio comedor arriba. El servicio fue espectacular desde que entramos hasta que nos marchamos, no tiene nada que envidiar al de un restaurante con estrella Michelin. La carta es muy amplia y las raciones son bastante generosas, demasiado incluso en algunos casos, por lo que recomiendo dejarse aconsejar por el personal. Empezamos probando la sugerencia del día del chef, que en nuestro caso fue unos "Hojaldre relleno de jamón y queso", perfecto para abrir boca. Continuamos con una exquisita "Fondue de queso", servida en el interior de un panecilllo y con una mezcla de 3 quesos; acompañada de distintos tipos de panes. Continuamos con un "Tentáculo de pulpo", con una guarnición de patatas asadas rellenas de alioli y unas verduras; espectacular lo tierno que estaba el pulpo. Finalizamos con un "Solomillo de cerdo con hierbas aromáticas y salsa de castañas", tierno y con un buen grosor como podéis apreciar en la foto. Esta magnífica cena la maridamos con un vinho verde blanco, "Vale Do Homem", de la cepa Loureiro, joven, fresco y con un poco de aguja, a un módico precio de ¡9€!; y un tinto de Douro "Nerdiz Reserva 2.007", complejo y con carácter, y a 14€. En definitiva, un restaurante muy recomendable. Precio medio: 25-40 €.

Comedor

Hojaldre relleno de jamón y queso

Fondue de queso



Tentáculo de pulpo
Solomillo de cerdo con hierbas aromáticas y salsa de castañas
Vale Do Homem

Nerdiz Reserva 2007

Mención aparte merecen los vinos en Oporto, presentes en todas partes de la ciudad y que harán las delicias de aquellos que seáis aficionados. La variedad más conocida es el Oporto, cuya principal característica es que se interrumpe la fermentación añadiendo aguardiente, lo que les hace conservar el dulzor de la uva y les da una graduación alta (entre los 19% y los 22%). Hay diferentes variedades de Oporto (Vintage, Ruby, Tawny,...), por lo que las posibilidades para maridar son interminables, desde un aperitivo, un postre o una carne. Además, en la misma región alrededor del río Duero en la que se produce el Oporto, también tenemos los vinos de la Denominación de Origen Controlada (DOC) Douro, que produce tintos y blancos de gran riqueza y que merece la pena descubrir. Y en el noroeste de Portugal, en la provincia de Minho, tenemos los Vinhos verdes (vinos verdes), que reciben su nombre por lo jóvenes que son, ligeros, frescos y con algo de aguja, unas características que los hacen únicos; os recomiendo probar los blancos. Merece mucho la pena cruzar el río y visitar alguna de las bodegas que hay en la localidad de Vila Nova de Gaia. En nuestro caso, visitamos la bodega Sandeman, una de las marcas más conocidas internacionalmente y famosa por el "Don de Sandeman", el misterioso personaje con capa que representa la marca. Por 5€, podéis realizar una visita en la que un guia, vestido con la característica capa, os explicará todo sobre la bodega y las distintas variedades de vinos de Oporto, finalizando con una degustación de dos copas de vino. No os podéis ir de Oporto sin visitar alguna de sus bodegas.

Bodega Sandeman

Oporto es una ciudad que sorprende a cada paso, con un aire decadente que le da su esencia y su encanto, bañada por el Duero y con aroma a vino por sus cuatro costados. Merece la pena caminar por sus empinadas cuestas y sus callejuelas adoquinadas. Oporto es una ciudad para disfrutarla caminando...y con las papilas gustativas, descubrir el Mercado do Bolhao, comprar en sus pequeñas tiendas de productos delicatesen lusos (como Comer e chorar por mais), disfrutar de una francesinha o un buen bacalhau, y brindar con una copa de Oporto.


Obrigado, Porto!
















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