Barcelona, una ciudad para comérsela

Barcelona

Una gastronomía poderosa

Vuelve la actividad al blog tras el verano con una serie de pistas gastronómicas para disfrutar de Barcelona, una ciudad con una oferta gastronómica casi inabarcable y en continua evolución.

Voy a empezar hablando de "El Nacional", el sitio de moda para salir a cenar. Ubicado en pleno Paseo de Gracia, se trata de un emblemático local multi-espacio que evoca a la Barcelona de la revolución industrial. Un espacio en el que se puede disfrutar de 4 restaurantes (La Brasería, La Tapería, La Llotja y La Paradeta) y 4 barras especializadas (cervezas y conservas, vinos y embutidos, barra de ostras y barra de cócteles).

El Nacional
Un local de otra época
En nuestro caso abrimos boca en la Barra de vinos y embutidos con un surtido de ibéricos y quesos, y después fuimos a La Tapería, un espacio en el que pedir las tapas a la carta o coger los platos conforme los van cantando los camareros, al estilo de Málaga. La calidad no es de lo mejor que se puede probar en Barcelona, pero el sitio es único y merece la pena visitarlo y picar algo. Es una buena opción para empezar una noche de viernes en Barcelona.

Surtido de embutidos y quesos
Bomba de la Barceloneta

La calidad no es de lo mejor que se puede probar en Barcelona, pero el sitio es único y merece la pena visitarlo y picar algo. Es una buena opción para empezar una noche de viernes en Barcelona.

A la mañana siguiente fuimos al "Mercado de la Boquería", uno de los mercado más grandes y visitados de Europa. En mi opinión está demasiado masificado y cuesta andar por sus pasillos, pero hay que reconocer la variedad de productos y la belleza de muchos de sus puestos. Si os animáis a visitarlo, recomiendo tomar algo en el "Bar Pinotxo", un clásico en el que su dueño Juanito elabora platos y tapas con los productos del mercado y donde no faltan ni los platos de cuchara.





Bar Pinotxo
La Boquería


En plena rambla del Raval y en un local que antiguamente ocupaba una bodega, encontramos el "Suculent", donde pude disfrutar de una de las mejores experiencias gastronómicas que recuerdo ultimamente. Un local que mantiene toda la esencia de la bodega, con un servicio excelente y una propuesta gastronómica basada en la cocina mediterránea, partiendo de platos tradicionales a los que aplican las técnicas más actuales, elaborados con productos de temporada. Pudimos disfrutar de platos espectaculares, como el "Ceviche de gambeta roja", la "Raya a la mantequilla negra", el "Steak tartar tibio sobre tuétano a la brasa", o el "Arroz de pato y anguila". En definitiva, todo un homenaje al espíritu slow food.
Ceviche de gambeta roja
Raya a la mantequilla negra
Steak tartar tibio sobre tuétano a la brasa
Arroz de pato y anguila


Si os apetece algún digestivo después de la comida, a escasos metros está el "Hotel Barceló Raval", con su Terraza 360º con piscina y una de las mejores vistas panorámicas de Barcelona.



Esa noche cenamos en "Antúnez", un local con encanto que se encuentra en el Paseo de Gracia. Un local muy bien llevado por un equipo joven y muy profesional, que ofrecen una cocina creativa en forma de platillos para compartir y a un precio equilibrado. Trabajan la mejor materia prima catalana, cosa que pudimos comprobar incluso en los vinos, con un espectacular "Cims de Porrera" del Priorat. De los platos que probamos, destacan las "Croquetas de gorgonzola trufada con pera", la "Tortilla de patatas con sobrasada ibérica", el "Papillote de rape a la donostiarra" y el "Canelón de pato con foie", la tapa estrella del local.
Croquetas de gorgonzola trufada con pera
Cims de Porrera


Papillote de rape a la donostiarra
Canelón de pato con foie
Tortilla de patatas con sobrasada ibérica

En definitiva, estamos ante una ciudad cosmopolita con una oferta gastronómica muy variada y para todos los gustos y bolsillos. Una ciudad con una cultura gastronómica muy asentada, basada en la cocina mediterránea y en constante evolución. Os animo a disfrutar de la gastronomía de Barcelona.




Comentarios