Macondo
Macondo
Todo un descubrimiento
Además de ser el nombre de un pueblo ficticio descrito en las novelas de Gabriel García Márquez, "Macondo" es también el nombre de uno de los mejores restaurantes que he descubierto en Murcia ultimamente. Aunque ya llevaba unos años en la ciudad, lo he descubierto recientemente tras su traslado a un local de la calle Sancho (donde estaba el Ginkgo Biloba). Su propuesta gastronómica se basa en una cocina creativa, con algunos matices orientales y tropicales y mucho sabor en todas las elaboraciones.
Aunque la carta al principio pueda parecer algo escasa, cuenta con una variedad suficiente; con una buena selección de entrantes y varias opciones de carnes y pescados. Es mejor una carta más reducida con platos atractivos, que una lista interminable de platos que luego no puedas ofrecer o queriendo dar la impresión de ofrecer de todo.
El local es sencillo, con tonos en blanco y negro y una iluminación que lo hace acogedor; además de contar con una pequeña terraza en la plaza.
Al ser la primera vez que íbamos, nos dejamos guiar un poco por su propietaria, una chica uruguaya que acertó con todas sus recomendaciones. Empezamos con unas "Marineras punto y coma", muy diferentes a nuestras clásicas marineras. Servida sobre una regañá de pipas en lugar de la típica rosquilla, lleva una crema de patata, ciboulette, aguacate y bonito en lugar de anchoa. No es fácil versionar a la reina del tapeo murciano, pero esta versión sorprende.
Marineras punto y coma |
Tras este acertado comienzo, continuamos con unas "Tartaletas de pollo", con unos taquitos de pechuga de pollo con una suave crema de mostaza y salsa de puerros; un sabroso bocado.
Tartaleta de pollo |
Seguimos con la "Patata al puñetazo", con panceta ibérica asada a baja temperatura y una salsa barbacoa con jalapeños. Romper y mezclar todos sus ingredientes es una explosión de sabor.
Patata al puñetazo |
De pescado nos decantamos por el "Tartar de atún". Un atún fresco y cortado a tacos, sobre una base de algas wakame, cubierto con unas láminas de algas nori y acompañado de una salsa con rabanitos que le da un punto de picante.
Tartar de atún |
En cuanto a las carnes, pedimos el "Pato Hoisin", un plato de origen oriental. Una carne muy tierna, cocinada a baja temperatura y con un golpe de horno, glaseada con salsa Hoisin -la salsa asiática más parecida a la barbacoa, algo más espesa y agridulce- y con maíz tostado para darle un toque latino y un toque crujiente.
Pato Hoisin |
Finalizamos con una deliciosa "Crème Brûlée de mango", una versión diferente de este postre típico francés. Una mezcla de sabores y contrastes, con la suavidad de la crema, el dulzor del mango, el crujiente de la costra de caramelo y unos arándanos casi helados.
Crème Brûlée de mango |
El servicio fue impecable, profesionales, atentos y dando acertadas recomendaciones.
Si en la literatura "Macondo" es el nombre de un pueblo ficticio, en Murcia es un restaurante que merece la pena visitar. Un restaurante que conjuga buena materia prima, creatividad, cuidadas elaboraciones e influencias latinas y orientales.
Macondo Restaurante
C/Sancho, 5
30001 Murcia
Tel: 660 69 33 23
Precio medio: 20-35 €
Comentarios
Publicar un comentario