Taúlla


Aires renovados en el antiguo molino de pimentón

Desde que salió la noticia de que el chef Rodi Fernández iba a estar al frente de la nueva etapa del Restaurante "Taúlla", teníamos claro que lo probaríamos pronto y eso hicimos hace unos días. Conocemos bien a Rodi de sus años en La Cava de Royán y siempre nos ha gustado su cocina, una cocina de autor con una base tradicional y muy pulcra y técnica.

Llamar antes de entrar


Detalles de la sala


Como muchos ya sabréis, está ubicado en un antiguo molino de pimentón de Espinardo. Una sala amplia, con pocas mesas y un ambiente íntimo y cercano, con techos altos y la cocina a la vista. Por supuesto, no faltan detalles que hacen alusión al pimentón, como antiguos carteles y botes. 

Cocina a la vista

Antiguos carteles de pimentón 


Trabajan con una carta corta y concisa, que completan con algún fuera de carta. Hay una buena oferta de entrantes y dan ganas de probarlos todos, pero se echa en falta alguna opción más de principal y que sorprendan un poco más. Una interesante carta de vinos y muy diferente a las habituales, con propuestas poco conocidas y muy buen trabajo de la sumiller que tienen. Pedimos un "Bermejo Listán Negro" de la D.O. Lanzarote, un vino con maceración carbónica y con un final largo y agradable.

Bermejo Listán Negro 

Pan con aceite 


Empezamos con unos "Salazones caseros" que elabora Rodi allí y que traen en un carro a la mesa. Lecha, lomo de atún, mojama de atún y hueva de mújol. Muy buenas texturas, en especial la de la hueva, muy cremosa. La ración es individual, tenedlo en cuenta al pedir para evitar sorpresas. 

Salazones caseros

No os debéis perder el "Panigiri de atún rojo y guacamole con crema de aguacate cítrico", el bocado que más nos sorprendió. Es una fusión entre el panipuri, una especie de pan frito típico de la India, y el nigiri japonés, de ahí la lámina de atún rojo con salsa ponzu que lo cubre. Se come con la mano de un bocado y es una auténtica explosión de sabores. Viene en una presentación muy original sobre un reloj de arena.

Panigiri de atún rojo y guacamole con crema de aguacate cítrico

 
Continuamos con la "Alcachofa salteada, panceta ibérica y yema de huevo". Una combinación que no falla, con un velo fino de panceta ibérica y la yema, para mezclar todo y disfrutar, aunque las hojas de fuera estaban un poco duras. 

Alcachofa salteada, panceta ibérica y yema de huevo


Seguimos con la "Gyoza de cocido murciano, hummus de garbanzo y caldo de gallina". Una gyoza diferente, ya que va frita, con un sabroso relleno y sobre una base de hummus, que en la mesa se baña con un rico caldo de gallina. 

Gyoza de cocido murciano, hummus de garbanzo y caldo de gallina

Otro plato que nos gustó mucho fue el "Brioche de pulpo, crema de cebolla con mostaza y mahonesa de lima". Un bocado muy sabroso, con el pan muy tierno y jugoso, relleno de pulpo frito, con una suave crema de cebolla y mostaza y una ligera mahonesa cítrica de lima y hierbabuena.

Brioche de pulpo, crema de cebolla con mostaza y mahonesa de lima


De los principales empezamos por el "Costillar de cochinillo", que nos lo ofrecieron fuera de carta. Va deshuesado y cocinado a baja temperatura, quedando totalmente tierno en su interior y la piel muy crujiente; con unas deliciosas patatas cocidas con especias de guarnición y una crema de berenjena ahumada.

Costillar de cochinillo 

Muy buena también la "Paletilla de cabrito a baja temperatura", sabrosa y con una textura que se deshacía en la boca y no hacía falta ni el cuchillo para partirla. No habría estado mal algo más de guarnición.

Paletilla de cabrito a baja temperatura

Y por último y también fuera de carta, la "Presa ibérica", perfecta de punto y a la brasa, que siempre sabe mejor.

Presa ibérica

De postre pedimos el "Cacao, turrón y mascarpone", un postre muy fino, con diferentes texturas y agradables sabores.

Cacao, turrón y mascarpone

Finalizamos con unos "Petit fours" cortesía de la casa, una trufa de chocolate y un bizcocho.

Petit Fours

El servicio fue muy bueno, tanto las chicas que nos atendieron como el jefe de sala fueron muy profesionales. 

En definitiva, en "Taúlla" se abre una nueva etapa para el chef Rodi Fernández y puede suponer un salto de calidad y un escaparate más atractivo para mostrar su cocina. En los entrantes se observan pinceladas de una cocina más divertida y disfrutona, algo que eché un poco en falta en los principales y nos quedamos con ganas de probar el estofado tradicional y ñoquis de panela, que no les quedaba. Hay mucho potencial y ganas y seguro que Rodi hará de Taúlla uno de los grandes restaurantes de Murcia.


Taúlla
C/Antonio Flores Guillamón, 2
30100 Murcia
Tel: 868 07 99 80
Precio medio: 45-50 €































Comentarios